JACQUES LACAN Y LA BÚSQUEDA DE LA VERDAD

Sermón pronunciado por Marc-François Lacan a la memoria de su hermano, el 10 de septiembre de 1981 en la iglesia Saint Pierre du Gros aillou.

Jacques Lacan ha hablado. ¿Por qué?
Para el saber, ¿es preciso escuchar a aquellos que, desde su muerte, hablan menos de él que de su propia posición con relación a él? No es el medio adecuado.
Lo que es preciso, es recordar quién era. Era un hombre; este hombre buscaba la verdad; el camino que abría para buscarla era la palabra.


EL HOMBRE
Las ciencias del hombre son sin duda nombradas así porque nos enriquecen de un saber sobre diversas funciones del hombre; de esta manera, nos permiten enmascarar y olvidar nuestra ignorancia del hombre mismo, nuestra inatención al hecho de que cada hombre es un misterio. Un misterio que permanece insondable.
Jacques Lacan, es primero un hombre, atento al hombre, a su realidad siempre inaccesible, a su deseo cuyo carácter propio es no estar nunca satisfecho.
En el mundo intelectual, se le clasificaba ya como psicoanalista, ya como filósofo, incluso como poeta, o también como estructuralista, surrealista, actor…; la lista podría continuar.
Pero es ante todo un hombre, del cual no es suficiente decir que era humano.
Su contribución al psicoanálisis, por muy importante que fuera, no permite decir quién era. Al contrario, es porque era ese hombre único, de nombre Jacques Lacan, como pudo poner de relieve el descubrimiento inaugurado por Freud: el del inconsciente. Tal puesta en valor que el colectivo de los psicoanalistas lo acogió con emoción.
¿Pero qué es el inconsciente? Al oír esta palabra, cada uno se preocupa por definirlo. ¿Qué revela esta preocupación? La mayoría de las veces indica menos una búsqueda de la claridad, que la huida de un misterio que inquieta y que, sin embargo, caracteriza la vida psíquica en su realidad.
El inconsciente escapa a toda definición; designa al hombre mismo en esta dimensión de su misterio que no le concede ninguna toma de contacto a su consciencia.
Hablar al hombre del inconsciente, es recordarle lo que (él) se aplica en olvidar; es salvarlo de este olvido de que todo está organizado para favorecer(lo) en este final del siglo veinte. Es recordarle en efecto que su centro está en otra parte que en sí mismo. Es hacerle descubrir que el camino a seguir no es el que Descartes inauguró.

“Pienso, luego existo.”

Esta deducción sobre la que Descartes se apoya ¿va a permitirle conocer este “Yo” que piensa? Lacan replicó “No soy lo que pienso”. La verdad así formulada brota del descubrimiento del inconsciente, dicho de otra manera, del hombre mismo. El reconocimiento del inconsciente permite al hombre tener acceso a su realidad; lejos de encerrarse en los límites de su vida consciente, debe abrirse a una relación que lo constituye, a una relación con el Otro.
Tal relación suscita una búsqueda: la búsqueda de la verdad, de la verdad sobre el Otro e inseparablemente, de la verdad sobre el hombre, constituido por su relación al Otro.


LA VERDAD
Jacques Lacan: un hombre; por lo tanto un buscador de verdad.
La verdad. Lo que designa esta palabra da miedo. Cada cual como Pilatos, reacciona diciendo: ¿Qué es la verdad? Y se va sin esperar la respuesta.
Lacan descubrió, gracias a Freud, el medio de entender la respuesta. “Freud, escribe él, supo dejar, bajo el nombre de inconsciente, hablar a la verdad.”
Dejar hablar a la verdad. He aquí el medio, el único, de conocerla. Ningún saber da acceso a este conocimiento. Escuchar la verdad es lo único necesario. Si la consciencia puede oír la verdad, a menudo se cierra. El inconsciente es la voz de la verdad reprimida; más precisamente es la vía, es decir el camino por el cual pasa, cuando el hombre ha rehusado
oírla.
Aquí ocupa el lugar la intervención del psicoanalista. Se calla; pero invita a hablar, para intentar oír la verdad que va a pasar por caminos inesperados, la verdad que va tal vez a parir el hombre que habla, no sin dolor.
Lo que Lacan invita a escuchar al psicoanalista, ¿es el enfermo? Es más bien la verdad que este ha reprimido, la verdad de su deseo. Es este tipo de escucha la que funda su método de psicoanalista.
Se trata de escuchar la verdad para decirla. Pero Lacan sabe “que es imposible decir toda la verdad, es por este imposible como la verdad se relaciona con la realidad.
Lo real es efectivamente inaccesible en su plenitud. Nosotros lo reducimos a lo que sabemos. Pero podemos abrirnos al conocimiento de reales y responder así al deseo profundo que nos constituye. Mutilar este deseo nos pone enfermos, psicológicamente, o espiritualmente. La salud, como la santidad, exige que busquemos la verdad, y, para eso, que la escuchemos hablar.


LA PALABRA
Nosotros podemos responder aquí a nuestra pregunta inicial, “¿Por qué Jacques Lacan habla? “ Porque habla todavía después de su muerte.
Se le ha reprochado su estilo, y la oscuridad que lo caracteriza. Él replica: “Bastarán diez años para que lo que escribo quede claro para todos.”

En efecto cada vez que un hombre es portador, no de un saber para comunicar, sino de una palabra que invita a buscar la verdad y, por eso, a escucharla, tropieza con un rechazo que se enmascara a menudo detrás de una acusación: “Lo que él dice es imposible de comprender.” (Cf Evangelio según S. Juan 6,60)
Lacan sólo ha hablado para otra cosa, para abrir la puerta de la Palabra que viene de otra parte, que es la Palabra del Otro y cuyo inconsciente pone de manifiesto su presencia; esta presencia es real y se manifiesta en su realidad por el miedo que provoca, y el rechazo a escuchar que es el fruto de este miedo.
Entonces, en la obra escrita de Lacan ¿Qué hay que buscar? ¿Una enseñanza oral inacabada y fijada? En absoluto, lo que hay que descubrir, es un hombre en busca de verdad, verdad que es el tesoro evocado en la fábula: había que cruzar el campo para encontrar un tesoro escondido. El tesoro pertenece a aquellos que aprenden por experiencia que este tesoro no es nada que se pueda poseer.
Porque la felicidad del hombre, es desear abrirse a la Palabra del Otro. Este deseo es suscitado por una presencia sin la cual el hombre ya no es él mismo y gracias a la cual brota de él una palabra que da testimonio de la verdad, una palabra que expresa su deseo siempre nuevo de la fuente de su vida de hombre.
La palabra de Jacques Lacan inquieta a los hombres a los que obliga a salir de su falsa paz, haciendo la verdadera pregunta, la pregunta siguiente. Efectivamente no: tengo que preguntarme: “¿Qué poseer o qué saber para convertirme en un hombre?” La verdadera pregunta, es: “¿Quién me llama a encontrar en su búsqueda el sentido de mi vida?”

Marc François Lacan
Monje benedictino

Traducción : Ángela Moratal.
Junio 2009 en Gandía, Valencia, España.

El Papa Francisco reabre el debate entre psicoanálisis y fe

El Papa, el pasado miércoles, posa con un grupo de feligreses en el...

Francisco pide a los poderosos que «escuchen el grito de la Tierra y de los pobres»

En Habemus Papam (2011) el director cinematográfico italiano Nanni Moretticontaba con humor la angustia existencial de un cardenal recién elegido Papa en la Roma actual. El Pontífice de la ficción, sobrepasado por los acontecimientos, acudía de incógnito a un psicoanalista romano -interpretado por el propio Moretti– para buscar apoyo. La realidad, a veces, supera la ficción. El Papa Francisco ha reconocido en un libro que saldrá próximamente publicado en Francia que durante seis meses él también tuvo que buscar la ayuda de un psicoanalista. No cuando fue elegido Obispo de Roma sino a finales de la década de 1970, en los peores años de la dictadura argentina y los más polémicos de su biografía.

«Consulté a una psicoanalista judía. Durante seis meses fui a su casa una vez a la semana para aclarar algunas cosas. Ella era médico y psicoanalista y siempre se mantuvo en su lugar. Después un día, cuando estaba a punto de morir, me llamó. No para recibir los sacramentos, dado que era hebrea, sino para tener un diálogo espiritual. Era una persona muy buena. Durante seis meses me ayudó mucho, cuando tenía 42 años».

En el libro El Papa Francisco: política y sociedad (Ed. L’Observatoire) el sociólogo francés Dominique Wolton recoge 12 entrevistas en profundidad que el escritor y el Pontífice mantuvieron a lo largo del año pasado. Francisco reflexiona sobre su relación con las mujeres, su madre, sus dos abuelas o una de las fundadoras de las Madres de Plaza de Mayo, Esther Ballestrino de Careaga, que fue torturada y asesinada durante la dictadura de Videla. «Agradezco a Dios por haber conocido a estas verdaderas mujeres en mi vida. Las que he conocido me han ayudado mucho cuando necesitaba consejos». Y recuerda la relación profesional que mantuvo con la psicoanalista judía en Argentina en uno de los momentos más difíciles de su vida.

Debate sobre la relación entre psicoanálisis y fe

Entre 1978 y 1979, el período en el que el Pontífice argentino acudió a terapia, Argentina estaba viviendo los peores años de la dictadura militar de Jorge Rafael Videla (1976-1983). Jorge Mario Bergoglio fue ordenado sacerdote el 13 de diciembre de 1969. A finales de 1979 estaba terminando su mandato provincial de los Jesuitas en Argentina, un cargo que mantuvo durante seis años. Un año más tarde fue nombrado rector del Colegio Máximo, donde se formaban los estudiantes que deseaban entrar en la Compañía.

Las palabras del Pontífice han reabierto el debate sobre la relación entre psicoanálisis y fe, dos conceptos que durante años fueron absolutamente incompatibles para la Iglesia católica. En 1961, con Juan XXIII como máxima autoridad de la Iglesia, el Santo Oficio prohibió a los sacerdotes ejercer y someterse al psicoanálisis. Juan Pablo II en 1992 abrió una puerta al entendimiento entre la religión y las disciplinas de la psicología y el psicoanálisis.

Durante un discurso ante un grupo de psicólogos reunidos en Roma reconoció su profunda estima ante quienes se ocupan de mantener los equilibrios psicológicos de los demás pero sostuvo que «ninguna terapia auténtica o tratamiento de disturbios psíquicos puede estar en conflicto con la obligación moral del paciente de perseguir la verdad y creer en la virtud».

‘No tengo miedo de nada’

El Pontífice reflexiona también sobre su vida actual y reconocer estar en una jaula. «Me siento libre. Claro, aquí en en el Vaticano estoy en una jaula, pero no espiritualmente. No tengo miedo de nada».

En el libro, que saldrá publicado la próxima semana y del que se van conociendo algunos extractos con cuenta gotas, Francisco reflexiona sobre las cuestiones que Wolton le plantea como el aborto –«es el homicidio de un inocente«–; el matrimonio entre personas del mismo sexo –«digamos las cosas como son: el matrimonio es un hombre con una mujer. Este es el término preciso–; o el Islam –«sería necesario hacer un estudio crítico sobre el Corán, como hemos hecho con las Escrituras»–.

 

Tomado de: http://www.elmundo.es/sociedad/2017/09/02/59aacc6be2704ec1218b45b7.html

El negocio de la espiritualidad o las terapias alternativas

Prometen la sanación, el éxito o el crecimiento personal. Venden saquitos que aseguran el amor, cristales que curan con supuesta energía de los ángeles o polvo de oro que atrae dinero. Se calcula que el mercado del esoterismo mueve tres mil millones de euros en nuestro país. Unas cien mil personas viven del negocio de la fe. A los antiguos curanderos se unen, en la actualidad, facilitadores o terapeutas y sus técnicas son ahora conocidas como terapias alternativas. Reiki, constelaciones familiares, biomagnetismo, son algunas de las 1400 que existen en España. No  hay normativa que las regule ni titulación oficial para quienes las imparten.

 COMANDO ACTUALIDAD

Ricardo es el dueño del mayor supermercado de productos esotéricos de Europa. Atesora, en un almacén de Alcobendas, en Madrid, más de 17.000 artículos. Velas ‘quiero trabajar pronto’, leche de ‘la mujer amada’, inciensos, piedras y centenares de barajas del tarot. Ricardo era peletero hasta que descubrió que “cuanto más desesperada está la gente mejor le va a él”. Factura un millón y medio de euros anuales. “La gente necesita creer, y él vende a dios o al diablo”.

 COMANDO ACTUALIDAD

Pepe León ofrece una caja de cristales con energía de los ángeles por 1.200 euros. Asegura que curan solos. Empresario y abogado, en su despacho practica constelaciones familiares, un método de terapia grupal que soluciona, dice, tics nerviosos, problemas de familia o que sana relaciones. Alicia lleva un año en paro y ha ido a constelar la relación con su madre, está sentada en círculo junto a otras diez personas entre las que hay directoras de hotel, terapeutas, amas de casa o músicos. Constelar la rabia y la tristeza  cuesta 90 euros; si se alarga a un fin de semana, sube a 300 euros.

 COMANDO ACTUALIDAD

Julián es padre de un joven que murió de leucemia, dice que su hijo abandonó su tratamiento médico para acogerse al consejo de un  terapeuta que aseguraba curar el cáncer con vitaminas. La Audiencia Provincial de Valencia ha reabierto el caso de la muerte de su hijo. Julián lucha porque las llamadas terapias alternativas sean reguladas. Por ello ha creado la Asociación para proteger al enfermo de Terapias Pseudocientíficas que asegura que en España hay 17.000 centros sin registro sanitario. Una de las terapias que acumula más denuncias es la ‘Sintergética’,  introducida en España por  Jorge Carvajal. Se presenta a sí mismo como carpintero de la conciencia o cirujano de almas. Enseña a sanar a través de las manos. Asistir a una de sus charlas cuesta entre 200 o 400 euros.

 COMANDO ACTUALIDAD

Pedro habla con los muertos, Elisabeth contacta con los espíritus, Fran dice que sus imanes  regeneran el PH del cuerpo, José es bombero y chamán, Elena canaliza espíritus guías por 100 euros la hora y vende velas para desatrancar la vida, geles de baño o fregasuelos mágicos. Son terapias que, según reconoce el propio Ministerio de Sanidad, no tienen ningún respaldo científico. ¿Qué hay detrás de estas nuevas terapias? ¿Quién las imparte? ¿Quién las controla? ¿Qué dicen médicos y psicólogos?.

Tomado de: http://www.rtve.es/television/20160408/negocio-espirtualidad/1333242.shtml

Física, piscoanálisis y Dios

ANTONIO LEIRA RODRÍGUEZ LICENCIADO EN CIENCIAS FÍSICAS POR LA UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID


En el año 1976 se publicó la segunda edición del magnífico libro Introducción a los conceptos y teorías de las ciencias físicas cuyo autor, Gerald Holton, impartía clases en la Universidad de Harvard. La traducción al español corría a cargo del Dr. J. Aguilar Peris, mi profesor de Termodinámica y Mecánica Estadística en la Facultad de Físicas de la Complutense de Madrid. Lo utilizaba como libro de consulta y apoyo en el curso de Física de C.O.U. (alumnos de 17-18 años) en un Instituto de El Bierzo (León). Allí aprendí a calcular las dimensiones de la Tierra siguiendo el método de Eratóstenes (273 – 192 a de C.) cuyo error de cálculo fue del 2% de su verdadero valor.
Recientemente ha aparecido la edición española del libro-joya Explicar el mundo, del premio Nobel de Física Steve Wienberg. A lo largo de toda la historia los físicos hemos tratado de conocer la realidad que nos circunda mediante la observación y para descubrir las regularidades y leyes que gobiernan los fenómenos físicos de la Naturaleza, teniendo que soportar en bastantes ocasiones las presiones de las instituciones religiosas cuando por ejemplo las teorías astronómicas no se ajustaban a las Sagradas Escrituras.
En Josué 10, 8-14. 10:12, Josué dijo en presencia de los israelitas: Sol, detente en Gabaón y tú luna en el valle de Ajalón. Claramente manifiesta una concepción geocéntrica. Y nosotros decimos con Galileo «Eppur si muove» (y sin embargo gira).
La formulación y desarrollo tanto teórico, como técnico de la Teoria Psicoanalítica marca un cambio de paradigma. Llegados aquí, definimos el sentido de la realidad del siguiente modo: es la capacidad de experimentar la realidad psíquica como tal y de diferenciarla de la realidad externa. Implica la experiencia simultánea y la correlación de los mundos interno y externo.
La física desde hace mucho tiempo trata de dar respuesta al problema de la existencia de Dios. Algunos científicos luchan incansablemente por refutar su existencia, o bien en afirmarla. El teórico más importante en estos momentos así como el más mediático es Stephen Hawkin. Conoce sin lugar a dudas el mundo externo, pero desconoce por completo su mundo interno.
Hay algunos temas de Astrofísica en Hawkin que resultan reveladores para interpretar su mundo interno: Los agujeros negros, la existencia de otros soles, y su preocupación por la existencia de Dios.
Los agujeros negros debe interpretarse, para el inconsciente, como el útero materno, y el potencial gravitatorio que confina a la luz en su interior sin posibilidad de escape, es para el inconsciente una regresión al útero. Desde la época de los egipcios Ra, dios del sol y de la vida, representa para el inconsciente el padre. Sr. Hawkin, la búsqueda de otros soles no es ni más ni menos que la búsqueda del padre.
Sobre la existencia de Dios: desde hace mucho tiempo el Psicoanálisis sabe que Dios no creó al hombre a su imagen y semejanza, sino que fue el hombre quien creó a Dios a su imagen y semejanza. Voy a darle una explicación sobre la existencia de Dios: En el amor que profesamos a nuestro padre, inherente a ese amor hay un deseo homosexual, dirigido hacia nuestro padre, si hacemos consciente este deseo homosexual, y renunciamos a él, el padre no tiene que ser reprimido y por consiguiente no se simboliza (Dios). Quiero recordar que sólo se simboliza aquello que se reprime.
Si en el amor que profesamos a nuestra madre, hacemos consciente el deseo sexual ligado a dicho amor y renunciamos a él, la madre no tiene que ser reprimida y por tanto no tiene que ser simbolizada (la Virgen y demás variantes).
Llegados a esta situación, el complejo de Edipo queda resuelto, se diluye. No entramos en la dicotomía teismo-no teismo, tenemos integrado el símbolo y con Dios simplemente nos tuteamos. Sr. Hawkin, la Física nunca resolverá el problema de la existencia de Dios porque simplemente ahí donde Ud. lo busca, no está.
Si dirigiera sus esfuerzos y sus presupuestos, por ejemplo a la investigación en la modificación del clima, siembra de nubes con cristales de ioduro de plata, producción de lluvia artificial, porque el sur de mi patria se seca, África se seca, podríamos hacer realidad el sueño de las personas del Sur de Europa, convertir el desierto en un vergel. Si emprende el camino de su análisis personal, será armónico con el Cosmos, no sentirá ni angustia ni desamparo y podrá decir sin rubor: El Universo siempre fue.
Post scriptum: El Dr. Freud habla sobre religión en su trabajo El porvenir de una ilusión.
En el volumen I de Amor,culpa y reparación, de las obras completas de Melanie Klein (Ed. Paidos), el trabajo El desarrollo de un niño (caso Fritz), en su página 20, tiene una conversación sobre la existencia de Dios.

Fuente: http://www.diariodeleon.es/noticias/opinion/fisica-psicoanalisis-dios_1067749.html